Con el café servido.
Once de la mañana, tocan la puerta. - Hola ¿qué tal?. Es mi amiga, me gusta las visitas sin previo aviso, es una sorprenda. siempre bien recibida. Nos saludamos y abrazamos como si hiciera tiempo que no nos vemos, aunque no es así. -¿Queres un café?. ¿Porque cuando vienen amigos a casa lo primero que se me ocurre es un café? Desde luego que no me pasa con otras personas, si viene el fontanero o el electricista tiendo a preguntar si quieren agua o un refresco. Reflexiono. Haciendo memoria, pensé en cuantas noticias había recibido con una taza de café humeante delante, cuantas historias he contado y a cuantas conclusiones he llegado, también he participado en silencios, risas, enojos y confidencias. ¿Tomamos un café?, pregúntate cuantas veces has dicho o te han dicho esta frase y luego pregúntate cuantas de esas veces la intención era solo y llanamente beber café. Cuando sugiero "nos tomamos un café".. estoy diciendo, quiero conocert