La armonía de las cosas


Hasta hace unos pocos meses  atrás, tenía el firme pensamiento que en algún lugar te encontraría, quizás en algún parque, con papel y lápiz dibujando el dulce caminar de una señorita, o simplemente haciendo cantar a un montón de extranjeros al son grave del viento.

Así que me apresure a vivir, aportando pulsos de optimismo, con los ojos puestos en el mañana, olvidando mi día a día y a la personas que intentan escalar los muros más altos, peleando contra dragones para llegar hasta mi. 
Soy una excéntrica, eso no cambia,  tu  sin embargo eres esa otra mitad que me complementa dejándome en armonía con todas las cosas.
Te vi una vez, me acariciaste, te sonreí, eres real y aun así, sigues sentado en tu planeta, intentando revivir a tu rosa.
Lo siento, pero dejo la magia.
Te guardare junto a tus letras, ahí donde los recuerdos son mi amuleto y por un segundo aun tengo alas. 

Deja que esta alma te acoja y cuide ese manantial de sangre nueva. Tenme presente como aquella chica un poco loca a la que le mostraste el paraíso estrellado de tu país, y sueña me con una sonrisa pintada en los labio, pues nunca dejare de ser feliz.

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